El soporte suele presentar un diseño elegante y moderno, a menudo construido con materiales duraderos como aluminio o acero.
Como sugiere el nombre, su función principal es admitir dos monitores simultáneamente, lo que permite a los usuarios ampliar el espacio de su pantalla y mejorar las capacidades multitarea.
Muchos soportes para monitores de pantalla dual vienen equipados con sistemas de gestión de cables integrados, lo que permite a los usuarios colocar los cables de forma ordenada y evitar enredos. Esto ayuda a mantener un espacio de trabajo ordenado y reduce el riesgo de accidentes o daños a los cables.
Más allá de simplemente sostener monitores, algunos soportes ofrecen características adicionales como concentradores USB integrados, ganchos para auriculares o soportes para documentos. Esto mejora la funcionalidad y utilidad del stand, atendiendo a las diversas necesidades de los usuarios.